La Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer y su Protocolo Facultativo: Manual para Parlamentarios nº 36; edición revisada

Autor Corporativo
Inter-Parliamentary Union (IPU)UN. Office of the United Nations High Commissioner for Human Rights (UN. OHCHR)
ISBN
ISBN(IPU) 978-92-9142-882-3(eng); ISBN(IPU) 978-92-9142-883-0(fre); ISBN(UIP) 978-92-9142-884-7(spa); ISBN(IPU) 978-92-9142-885-4(ara)
Colección
178 p.
Idioma del recurso
inglésfrancésespañolárabe
Año de publicación
2023
Palabra Clave
Gender discriminationSignaturesRatificationsParliamentary practiceAnti-discrimination measuresHuman rightsWomen's rights
Tema
Derechos humanos
Tipo de Recurso
Planes de estudios, material didáctico y guíasOtro(s)
Nivel de Educación
Otros
Región
Global
Lugar de publicación
Ginebra

 

Más de cuatro décadas después de su adopción, la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer continúa siendo una guía esencial y ambiciosa para lograr la igualdad de género de forma generalizada, desde la familia y las aulas hasta los consejos ejecutivos y los cargos de liderazgo político. Pese a los considerables avances que se han alcanzado desde la entrada en vigor de la Convención, ningún país puede reivindicar aún haber logrado plenamente la igualdad entre los géneros.

Los progresos conseguidos en materia de derechos humanos de la mujer y de igualdad de género están en un grave riesgo de invertirse fruto de diversas crisis, que abarcan desde la pandemia de COVID-19 y la triple crisis planetaria relativa al cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad, hasta los conflictos armados y el desplazamiento, y el alza del autoritarismo. La igualdad de género es un elemento fundamental del desarrollo sostenible y la paz. Las dificultades actuales no se pueden sortear si las mujeres —que constituyen la mitad de la población mundial— quedan excluidas de una participación y un liderazgo plenos y equitativos en los ámbitos económico, político y social. Por lo tanto, la Convención sigue actuando de pilar sólido para desarrollar un mundo más resiliente y sociedades más inclusivas.